En diciembre de 2014, la Compañía Sudamericana de Vapores (CSAV), ligada al grupo Luksic, concluyó el proceso de fusión de su negocio de portacontenedores con la naviera alemana Hapag-Lloyd. Desde esa fecha, la dotación local de la empresa chilena se ha reducido fuertemente, llegando en la actualidad a cerca de 50 personas.
En noviembre del año pasado, Rolf Habben Jansen, gerente general de Hapag-Lloyd -firma de la cual CSAV es principal accionista-, señaló que se había desvinculado a un total de 1.500 personas en el marco de la fusión con CSAV.
En este contexto de reducción de equipos de trabajo en Chile, Vapores decidió explorar la venta de activos inmobiliarios prescindibles, en particular oficinas que ya no necesita, por su menor tamaño tras la fusión. Destaca, en este sentido, la intención de enajenar el emblemático edificio en Plaza Sotomayor 50, Valparaíso, y algunos pisos en la torre ubicada en Hendaya 60, en el sector del barrio El Golf, en Santiago.
Según conocedores del proceso, Vapores optó por conocer -sin apuros- en cuánto valoriza el mercado dichos activos, sabiendo que el sector de oficinas pasa por un período de alta vacancia y alta oferta, pero también con la certeza de que dichas propiedades cuentan con ubicación privilegiada tanto para el caso de Santiago como Valparaíso.
En el proceso de acercamiento con posibles interesados, la naviera está siendo apoyada por la firma de servicios inmobiliarios Colliers International. En esta compañía declinaron referirse al proceso.
De todos modos, otras fuentes al tanto de la operación indicaron que las opciones que baraja Vapores para comercializar esas propiedades son la venta, realizar proyectos en conjunto o mantenerlas en arriendo con contratos a largo plazo.
Actualmente, Vapores mantiene un acuerdo de arriendo a cinco años con la alemana Hapag-Lloyd, firma que está ocupando actualmente el edificio en Plaza Sotomayor.
La propiedad en Valparaíso -que tiene características de patrimonial- cuenta con nueve pisos de altura y está unida a un sitio que también es de CSAV. Si bien la torre ha tenido un perfil de edificio institucional, quienes están al tanto del proceso no descartan que un inversionista particular pueda adquirirlo y dedicarlo a la renta de forma fragmentada, por pisos. Incluso, en el mercado destacan que se trata de una ubicación ideal para el desarrollo de actividades de retail , específicamente para una multitienda.
Actores del mercado consultados por estimaciones de precio indicaron que fácilmente el edificio de Plaza Sotomayor se puede comercializar en más de US$ 10 millones. El eventual nuevo arrendatario o dueño de dicho inmueble deberá respetar los años de arriendo que le quedan a Hapag-Lloyd.
Ese edificio de CSAV fue inaugurado en diciembre en 1876, y perteneció a la Casa Importadora de Maquinarias Agrícola y Mineras Rosse-Innes, según consigna la publicación «Guía de arquitectura de Valparaíso». El texto agrega que el inmueble original fue intervenido en dos oportunidades por sus primeros dueños, y tras ser vendido, en 1918, se le agregó un tercer nivel de bajo perfil. Luego, en la década de los 90 se construyó un nuevo edificio, y se conservaron los muros perimetrales.
Actualmente, CSAV opera en el piso 14 del edificio de Hendaya 60, pero también posee los niveles 9, 10, 11, 12 y 13, según consta en su última memoria corporativa disponible. Estos últimos son los que se estarían comercializando.
En Valparaíso, igualmente, la naviera posee el edificio de oficinas Tecnopacífico, que está arrendado.
450 trabajadores habría llegado a albergar el edificio de CSAV en Valparaíso antes de la fusión con Hapag-Lloyd.
Nueve pisos tiene el edificio de Vapores en Plaza Sotomayor 50, inmueble que data de 1876.
fuente: economiaynegocios.cl